¿Te imaginas aprender a liderar un equipo, gestionar conflictos o mejorar la empatía profesional sin moverte de tu oficina, pero como si estuvieras en una situación real? Esa es la promesa de la formación inmersiva en habilidades blandas, una nueva forma de capacitar que combina tecnología 360, realidad virtual (VR) y entornos interactivos para aprender haciendo.
La formación tradicional (presencial o incluso e-learning) ya no basta para desarrollar habilidades sociales, emocionales o de liderazgo. En un mundo laboral en cambio constante, donde la comunicación, la inteligencia emocional y la capacidad de adaptación son clave, necesitamos herramientas más efectivas y envolventes. Aquí es donde entra en juego esta metodología.